viernes, 7 de junio de 2013

Donde va el alma al morir? es una pregunta que se ha hecho la humanidad a traves de su historia y vamos a darle la respuesta desde nuestro punto de vista.
En primer lugar lo que hay que aceptar que la muerte no existe, no en el sentido que se le da: el no saber que sucede luego que el cuerpo deja de funcionar. La llamada muerte es el abandono de un vehiculo que nos permitio interactuar en una dimension inferior o igual a la de nuestro espiritu. Asi que al dejar este vehiculo simplemente volvemos a nuestro lugar: la dimension que nos corresponde de acuerdo al nivel vibracional del alma. Y en dicha dimension segun seamos de luz o de oscuridad iremos para un lado u otro y dentro de dicho ambito de luz o de oscuridad habitaremos un mundo que se corresponda con nuestra congregacion o segun el caso de aprendizaje que debamos llevar iremos a un mundo multiple en congregaciones donde obtenemos enseñanzas de distintas hermandades segun nuestras necesidades.
En la dimension que nos corresponde todo se ve fisicamente, todo es denso como es aqui, pues todo lo que esta vibrando como nosotros se hace ver denso, palpable, se puede tocar, usar, y todo lo que hacemos ahora en este plano. Asi que en cierta manera se puede decir que llevamos una vida fisica, solo que sin los padeceres de aqui, pues cuanto mas alta la dimension mas pura y amorosa, mas pacifica y armoniosa, por decirlo de una manera grafica cuanto mas alto estemos vibrando, estaremos viviendo en un paraiso mas perfecto.
El principal cambio es que no estamos recluidos en el vehiculo que usamos en este momento y esa libertad es maravillosa, si tuvieran nocion de cuanto nos limita este cuerpo, de lo poco que podemos hacer con el. En esos mundo vivimos en casas, pero no se asemejan demasiado a lo que conocemos en este planeta. En los mundos arboreos o sea en planetas Jupiter las casas pueden desarmarse y volverse a armar en segundo si debemos trasladarnos, es como que podemos llevarla en una valija. Su estructura es de un material que se modifica segun nuestro pensamiento, elaboramos la casa mentalmente y el material recibe ese pensamiento y se construye, podemos cambiar su arquitectura todo los dias si quisieramos.
Los arboreos o jupiterianos somos azules, ese es el color de nuestra piel. Somos delgados y bastantes altos, nuestros rasgos son similares a los humanos de este planeta y eso es parte porque algunas de vuestras etnias han sido creaciones nuestras.
Cada dimension tiene sus particularidades y maravillas, inclusos nuestros fisicos se ven modificados al subir de vibracion, en el caso nuestro la piel sigue siendo azul pero se hace mas brillante, casi como si pintitas de oro bañaran la piel azul.
Sean como sean las cosas, lo que se debe tener en claro es que no dejamos de existir, que la vida es eterna y somos eternos y que nuestro destino es evolucionar, nuestra decision es si lo hacemos rapido o lento. Asi que a dejar de dramatizar con la muerte, considerela como un premio por haber terminado la labor y que se vuelve a casa, tenga esto muy en cuenta, estamos de visita y en algun momento debemos volver a casa. Despidan con alegria, con amor y en paz a quien se marcha, esa energia le sera de mucha ayuda para ese transito, que en los espiritus mas jovenes y apegado a lo terrenal les puede resulta algo traumatico.
No lo olviden nunca somos eternos, lo que Dios crea no se destruye, se puede modificar muchas veces y en formas y figuras distintas pero la esencia que sostiene sera siempre la misma.

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