domingo, 12 de febrero de 2012

Apocalipsis

El apocalipsis no tiene una fecha. No ocurre en un dia. Se trata de un evento que insume mucho tiempo. Su comienzo fue cuando Jesus trajo la energia amorosa de vuelta a la tierra. Luego de dos mil años para que dicha energia se asentara y comenzara a llegar a los corazones, fuimos enviados para reinstalar el arbol de amor (conocido en la biblia como arbol de la vida). La filosofia del arbol y su mandamiento: "todo corazon debe estar lleno de amor" son los complementos de la energia amorosa. El tercer punto del apocalipsis es el cambio de dimension del ser planeta. La tierra es un ser mineral y contiene un alma: alma mineral. Este espiritu tiene su propio camino evolutivo y es en estos momentos en que esta pasando de una dimension a otra. Esto implica grandes cambios en su naturaleza, muchas transformaciones, las cuales incidiran en los humanos. Todo este cambio llevara un tiempo que se ira acelerando dia a dia. No sabemos cual es ese tiempo pues es algo que le compete al alma del planeta.
Entonces no hay que preocuparse que dia sucederan ni como ni cuanto van a durar. Todo aquel que quiera superar los cambios del planeta y no sufrir ni ser destruido por ellos, debe entrar en sintonia con el planeta y para eso debe estar embuido de la energia amorosa.
La tierra vuelve a ser un planeta de luz, por lo tanto solo podran residir en este mundo seres de luz, seres amorosos. Casi todos los planetas son de luz o de oscuridad; muy pocos son duales como lo es ahasta hoy la tierra; los amorosos tienen sus lugares en el universo y los no-amorosos los suyos. Se utilizan los planetas duales para que los seres aprendan como es el otro lado, como son las cosas en el universo y como y cual es el camino ideal de evolucion.
La tierra ha cumplido su ciclo como dual, acepto esa mision para su evolucion y ahora vuelve a ser de luz, seamos de luz, seamos amorosos y convivamos armoniosamente con los seres minerales, con los seres vegetales, con los seres animales, con los seres elementales, y con todos nuestros hermanos: los seres humanos.

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