martes, 21 de febrero de 2012

la vida


Que es la vida? La vida no es una pregunta, no se trata de atravesarla buscando la respuesta. La vida esta para ser vivida. La vida fue, es y será por siempre. La vida somos nosotros: los seres. Las almas contenidas en las formas y las almas libres en sus universos.

No es un tiempo de vivencias en este plano y luego la nada. Todo tiene vida, todo tiene el soplo divino, la chispa mágica que mueve a los universos, todo es y todo será por siempre, como siempre ha sido. No hay principio ni fin para la vida. Todo lo efímero solo son manifestaciones vibracionales de una vibración mayor, de un algo que es eterno. La vida es energía y somos energía en esencia. Aun en este plano somos energía, mas densa, mas condensada, pero igual lo somos y no debemos detener la mirada en la parte densa, la vida no esta allí, en esas cosas que cambian a cada instante. Las formas son solo apariencias con las que nos manifestamos, es la parte menos sutil, es lo más denso en cada plano, en cada estadio, en cada dimensión. Y en todas tiene su propia impronta, su forma de manifestarse, cual diferente es la expresión física de un humano al cambiar de vibración. Que distintos son los universos y que bellos se ponen a medida que nos elevamos y crecemos.

Así que no aferreis a vuestros cuerpos, ni te envanes en pulirlo estéticamente si en un soplo de la vida será polvo y se perderá en el tiempo. Ocúpate del embellecimiento de tu alma que si es eterna, que si esta viva. Tú eres tu alma y no tu cuerpo, esa es tu eternidad. Hoy estas encerrado en tu forma física y por lo tanto debes honrarlo y santificarlo. Pues es tu cuerpo por donde te manifiestas, por donde expones tu alma. Así como el te representa debes cuidarlo y mucho. Evita todo tipo de exceso y de locuras. No te drogues, ni te automediques, ni consumas cosas en demasía como el alcohol o el cigarrillo. No te implantes nada, ni siliconas ni fierritos, no te tatúes. No destruyas tu cuerpo ni lo humilles, deja de lado la violencia hacia a ti como hacia tus semejantes. No tortures, ni mates, ni generes hambre, sufrimientos o miserias en tus hermanos. Todos los cuerpos deben ser honrados y amados sin importar su color, su tradición, religión, pensamientos, educación, palabra y su posición frente a la vida.

Que un cuerpo sea efímero no implica que se lo desprecie, se lo ignore o se lo maltrate. Debes cuidarlo y mimarlo, debes amarlo, debes amarte y respetarte. Si te denigras, si te humillas por logros terrenales tienes doble pérdida: la de tu cuerpo y la de tu alma.

Ámate si quieres que te amen, ámate para saber como amar a los demás, ama sin condiciones, ama al que te rechaza, al que te odia y al que te mata. Entrega una sonrisa al insulto, una mano extendida como ofrenda frente al golpe, mira amorosamente a la mirada torva, besa al que te desprecia, abraza al que quiere destruirte, ama con mas amor al que odia para lograr revertir su odio. Es muy fácil amar al que nos quiere y nos mima. La prueba es amar al que nos enfrenta, al que nos persigue. Ama libremente, sin miedo a expresarlo, abraza y besa con pasión almica.

Ama que eso es la vida, el amor es vivir y estar vivo, es ser amoroso. La vida no es una pregunta que lleva a caminar en búsqueda de la respuesta, sino amar cada paso que se da. Es la manifestación de la paz. Entonces ama para estar vivo. Se pacifico. Entrégate a todos, ofrece la luz de tu alma como luminaria para los que caminan en la noche de la vida oscura, para los que aun en el mediodía están en tinieblas.

Amar es estar vivo y vivir, es llenarse de amor y expandirlo. Así que si quieres saber que es la vida mira tu corazón, siéntelo. Observarlo, déjate llevar por sus pulsaciones. La mente condiciona, objeta y clasifica y de allí surgen las diferencias, las divergencias, los recelos y se crean las violencias y aparece la muerte. Has que tu mente se subordine al corazón y así se vaya llenando de amor y comience a razonar amorosamente, deje de cuestionar y acepte a cada uno como es.

Con la mente y el corazón en armonía, tu cuerpo es pura luz y esa luz amorosa es la mayor energía, y esa energía es el mejor contagio que podemos producir en los demás. A cada paso debemos irradiar tanta luz que esta convierta a todo y a todos y así construir un mundo en paz, en armonía. En vez de protestar por las guerras, las violencias, los odios, pon tu grano de arena siendo un ser de amor. Cuando la mayoría de los corazones sean convertidos llegara la paz. Así que comienza por amarte y amar al prójimo, es el primer paso y debes darlo tú. No debes esperar a que otro te ame, debes ser el primero, debes ser la expresión del creador, del infinito. Somos simples seres, pequeños y humildes, pero somos seres y por lo tanto somos amor. Somos dios en potencia.

El amor es la verdad. El amor es la vida.

2 comentarios:

  1. Muy buena reflexión, todo eso es la vida y como finalmente rematas el post: El amor es la vida.
    Saludos
    David

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  2. gracias david, abrazo y que el amor este contigo

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